Plainte (lamento)

Je ne sais pas pourquoi, aujourd'hui, je suis un petit peu plus sensible que d'habitude (?) et je vais à ajouter un post d'un écrit d'il y à deux ans.
C'est une plainte et un hommage. Plainte pour une perte et hommage pour celle qui est perdue, Elle.


Ojos que miran pero no ven. Grisura de un cielo ausente. Mañana de domingo en febrero. Aciago febrero, mi Febrero.
Domingo de gentes deambulando, paseando cansancio y tedio por las calles también tristes, sin luz.
Aire romo, plano, sin aristas. Hace viento desganado, como sin querer, este domingo de febrero en que miro sin ver. Quizás me han huído los ojos a no sé qué lejanos paraisos, buscando no sé qué quimeras esta vez.
A mis ojos, esas lucernas por las que penetra una vida que me cuesta comprender, les gusta solazarse con la luminosidad solar, con las estrellas rutilantes, también con los destellos singulares de otros ojos.

Febrero amargo. Mi Febrero.
Febrero frío de despedidas y de ausencias.
A veces un corazón encendido basta
para calentar un invierno gélido.
Pero cuando falta el fuego,
cuando la brasa amaga ceniza,
todo se vuelve gris, hasta el cielo.

Mis ojos nada ven bajo las cúpulas
grisáceas del desconsuelo.
No hay sol, ni estrellas, ni ojos con destellos;
no hay brasas ni calor ni llamas,
no hay fuego que caliente este domingo de hielo...

Nada veo aunque miro,
quizás porque miro hacia adentro
y allí, oscuro y silencioso,
sólo es vacío lo que encuentro.

Febrero, mi Febrero, ¿por qué volviste
hacia mí tu rostro más horrendo?
Devuélveme la luz, envíame de nuevo
el sol y las estrellas y otros ojos con destellos
que puedan ver las maravillas
que en mi corazón encierro,
o para poder yo ver las maravillas
de los escondidos universos
tras aquellos ojos cuando me miren
llenos de luz y misterio.

Enfin, un temps passé mais encore present.