Te recuerdo

Te recuerdo...
vestida de arreboles,
de sonrisa vaporosa
y de misterio...

...de desnuda mirada
tendida al sol,
apenas cubierta
por un velo,
sugerente,
de ensimismamiento...

¡Qué bella te recuerdo...!

Con el pelo en cascada
-aquel look a la française-
enmarcando tu gesto,
como una diadema
sobre el firmamento:
todo ojos, todo labios,
todo curvas suaves,
todo espacios abiertos,
en infinita expansión
cuando el gesto risueño
se asomaba al balcón
de tu silencio.

Sí,
te recuerdo vestida
de sueños,
pero, también, desnuda
de sentimientos...

...con la desnudez fría
-más fría que el hielo-
del espacio desnudo
o del planeta desierto.
...

Es curioso,
recuerdo de ti tantas cosas
que me siento perplejo
al no poder recordar
ningún mal momento...

Turbación, sí,
también desasosiego,
y aun angustia vital

en momentos de desconcierto,
pero siempre provocados

por tanto sentimiento
que amenazaba estallar
y reventarme el pecho...

Si eso hubiera ocurrido,
Bella de mis desvelos,
no te hubiera sapicado mi sangre,
sino mis sueños:
ninfas mariposas,
jazmines con duende,
bellos agujeros negros
atrayéndome a su abismo
sin remedio,...

Y... ¡ya está bien por hoy!
¡basta de recuerdos!
Para sentirte presente
no necesito memoria,
simplemente... te siento.

l